Serie de cinco botes de farmacia con letras de origami en papel de estraza
que forman la palabra «deseo».
El cristal unido
a la humildad de la estraza
envolviendo un amplio concepto.
«No deseáis nunca a alguien o algo, deseáis siempre a un conjunto.
¿Cuál es la naturaleza de las relaciones entre los elementos para que haya deseo, para que se tornen deseables?
Yo no deseo a una mujer, deseo a su vez un paisaje que está envuelto en esa mujer, un paisaje que puedo no conocer, y que presiento, de tal suerte que, si no despliego el paisaje que ella envuelve no estaré contento, es decir, mi deseo fracasará, mi deseo quedará insatisfecho. Dicho de otra manera, no hay deseo que no fluya, que no fluya en un agenciamiento. Desear es construir un agenciamiento, construir un conjunto, el conjunto de una falda,
de un rayo de sol...»
El abecedario de Gilles Deleuze.
Entrevista con Claire Parnet.