Hace ya tiempo que bordo la mirada
de mujeres que aparecen en postales de principios del siglo XX. La selección responde a un intento de comprender, comprenderme, y descifrar la semántica de los ojos. Muchas de las postales las he enmarcado en papel —técnica recuperada del siglo XIX—, y otras con molduras viejas encontradas por Madrid. Cada pieza es única, y en ellas se establece una renarración gracias al bordado, la imagen y el texto manuscrito, con el fin de tensar el ángulo de visión de esas mujeres, la mayoría de ellas sujetas a la tiranía de su tiempo y condición. A través del hilo se descubre una tensión latente en la imagen original. Esa tensión es incómoda y, a veces, socarrona. Con los hilos se reescribe la mirada femenina en su deseo y su verdad, comprendida y reivindicada desde la tensión del hilo
y la mirada actual.
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Aquí lo que publicó El Confidencial :)